Diciendo que “la explosión de un volcán es una maravillosa oportunidad que debemos aprovechar al máximo”, el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha anunciado esta semana que ha propuesto a la ciudad para acoger la próxima explosión del volcán de La Palma. “Barcelona es una ciudad abierta al mar y con una vocación tecnológica e innovadora que la convierten en el lugar idóneo para acoger una explosión volcánica de esa magnitud o incluso mayor”, ha explicado el político del PSC.
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha destacado que la explosión del volcán no debe ser un evento pasajero, sino que debe dejar un “legado que trascienda”. “Quizá en forma de terreno ganado al mar. Quizá urbanizable. Veremos, estamos todavía en fase de conversaciones, pero lo que es evidente es que Barcelona, con esto [un volcán] está saliendo del estancamiento en el que cayó durante la administración anterior”, ha explicado Collboni.
La localización que elegirá el volcán de La Palma para salir del suelo todavía está por escoger dado que, como ha explicado el alcalde, “hablamos de un proceso geológico complejo”, pero el fenómeno magmático tiene “carta blanca” para fracturar la superficie y expulsar material piroclástico donde desee. “No será necesario, al contrario que con la Fórmula 1, la Copa América o los desfiles de moda, cortar calles o pavimentar el terreno porque “los devastadores ríos de lava irán, lógicamente, por donde buenamente puedan”.
“Habrá tiempo para comer, habrá tiempo para comer de sobras”, ha dicho Jaume Collboni ante las críticas.
Tras el anuncio del alcalde de Barcelona, José Luis Martínez-Almeida ha preguntado a sus asesors con cuántos árboles puede acabar, a la vez, una explosión volcánica y se ha propuesto arrebatarle a Barcelona la candidatura.
