El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha enviado esta semana 40.000 millones de dólares, 200 misiles y 500 antimisiles a Rusia tras confundirla con Ucrania. El cargamento ha llegado en el día de hoy a Moscú y ya forma parte del arsenal del ejército ruso.
Tras llevar a cabo el envío, Joe Biden ha destacado la importancia de acabar cuanto antes con Ucrania y ha reiterado su apoyo al pueblo ruso. Acto seguido, ha sido corregido por sus asesores, pero el arsenal bélico ya pertenece a Rusia porque, aunque el Departamento de Estado ha tratado de pedirle al Kremlin que devuelva el envío «que no era para vosotros sino para otra gente», los responsables rusos se han negado en rotundo.
Con una agenda muy cargada esta semana, Joe Biden ha dedicado toda la mañana a preparar con Donald Trump una estrategia para derrotar a Kamala Harris. El presidente estadounidense ha compartido con su rival político todo tipo de informaciones delicadas sobre su vicepresidenta que, en manos de Trump, podrían acabar con su carrera política para siempre.
Tras llevar a cabo una exhaustiva investigación, el FBI ha descubierto que Biden lleva desde el segundo año de su mandato enviando sistemáticamente cargamento militar a Rusia al confundirla con Ucrania. La agencia descarta que el presidente sea un espía ruso porque está demasiado senil para desempeñar un trabajo de tal naturaleza.
